PERFIL ORNELLA CARON - Por Nicolás Ipólito
Ornella Caron nació el 7 de abril de 1989 en la provincia de Córdoba, Argentina. Actualmente reside en Barcelona, Catalunya.
Su incursión en el deporte fue a los 6 años gracias a sus padres, que iban a jugar al squash al club Barrancas de Córdoba donde la mandaban a tomar clases de tenis. Además, practicó otros deportes como el patín y la gimnasia rítmica, pero decidió decantarse por el juego de la raqueta ya que era el que más le gustaba. Al principio jugaba solo por diversión pero cuando un entrenador del club habló con sus padres y les dijo que le veía excelentes condiciones para este deporte, comenzó a dedicarse en exclusividad, abandonando la práctica de los otros.
La tenista conoció a los torneos de Haciendo Tenis cuando estaba en Córdoba y tenía el objetivo de crecer tenísticamente, pero al vivir en otra provincia los viajes eran muy caros y podía llegar a competir solo una vez por mes. Sin embargo, el 2012 fue un año bisagra para la carrera de Ornella ya que conoció en un future a Mariela García, que en ese momento hacía entrevistas para BATennis, y le ofreció irse a vivir con ella a Buenos Aires porque le veía condiciones y quería que siga compitiendo en los torneos que se disputaban en el área metropolitana y sus alrededores. También, ese mismo año, logró ganar la mayoría de los torneos de Haciendo Tenis. El hecho de vivir en la capital del país le permitió tener acceso a la mayoría de los Haciendo Tenis y otras competencias de la ciudad y su periferia.
Además, intentó aventurarse en el profesionalismo y compitió en torneos que daban puntos para el ranking destacándose en un torneo de 10k+H disputado en Paraguay donde perdió en la final, con buen juego a lo largo de la competición. Alcanzó la posición 784 como mejor ranking WTA, pero debido a las lesiones, la falta de constancia, falta de entrenamiento tanto mental como físico y lo oneroso que resulta competir en este deporte en los torneos fuera del amateurismo, la hicieron dejar de intentar en el ámbito profesional del tenis. A pesar de esto, a sus 22 años, en 2012 le surgió la oportunidad de ir a Francia para jugar torneos de Interclubes y decidió quedarse a competir allí ya que le sirvió para crecer tenísticamente. Esto le proporcionaba suficiente dinero como para mantenerse bien económicamente en Argentina, para financiarse sus viajes para jugar al tenis y para volver a viajar al año siguiente al viejo continente. En 2013 tuvo la oportunidad de formar parte del Pierrelatte Tennis Club de Francia que conoció gracias a Marcela D’Emilio, entrenadora argentina que vivía allí, quien se comunicó con ella y le ofreció formar parte del equipo que en ese entonces se encontraba en la tercera división. Ornella en ese momento se fue a vivir a Francia sola y con el objetivo de seguir compitiendo en los torneos e Interclubes que haya en el país. Logró ascender al equipo hasta la primera división, categoría en la que se encontraban muchas tenistas con buen nivel y del top 200 e incluso jugadoras que eran del cuadro de Roland Garros. Esto demuestra la audacia de la cordobesa, que con escasos recursos y sin conocer el idioma, tomó el desafío de instalarse en la ciudad de Pierrelatte de la Auvernia Francesa.
Uno de sus mayores logros tenísticos en lo personal data en 2014, cuando participó de un future en Highland Park en Buenos Aires y mostró un gran nivel en todas las fases de la competencia. En ese torneo, perdió en semifinales contra la rusa Irina Khromacheva. Este torneo fue un gran logro personal para la cordobesa ya que se presentó sin ranking y sin mucho entrenamiento, logrando un muy buen desempeño y un puesto alto en la competencia.
Otros hitos para destacar fueron el ascenso del Pierrelatte Tennis Club a primera división desde la tercera y el gran desempeño que mostró en 2012 en los campeonatos de Haciendo Tenis, cosechando 11 torneos de 13 que se jugaron ese año. También formó parte del plantel de San Lorenzo que hizo que el club ganara su primer Interclubes en 2017 derrotando en la final al Buenos Aires Lawn Tennis Club y tuvo la oportunidad de defender el título al año siguiente con el equipo de Boedo y lograr así el bicampeonato.
La tenista de 31 años está por el momento retirada debido a una lesión grave que tuvo en su rodilla derecha en junio del 2019, pero aun así no le cierra las puertas al deporte. Después de casi toda su vida jugando al tenis y tras 9 años en el circuito francés, decidió devolver un poco de lo que le había brindado este deporte y pensó en los más chicos. Así que a pesar de estar fuera de la competencia, sigue vinculada al tenis gracias a Routennis, donde Ornella es la CEO. Es una empresa que brinda una experiencia internacional donde los chicos crecen adentro y fuera de la canchas. Consiste de una gira de torneos por toda la Costa Azul francesa, que se disputa durante el mes de julio de cada año, ya que es donde mejor competencia hay y se le puede sacar el mejor provecho. Esta experiencia está orientada a jóvenes tenistas que quieren dar sus primeros pasos, de cualquier nivel, brindando una competencia sana y continua donde ganar o perder no es determinante para poder seguir jugando al tenis. Esto último está ligado a su experiencia en el tenis francés, ya que cuando empezó a competir en los torneos estaba sorprendida por el llamado “tercer tiempo” que se daba una vez finalizado el partido. Este consistía en que el ganador del partido le ofrecía ir a tomar algo al que perdió y así formar un nuevo espacio que le pareció interesante llevar a cabo en su proyecto. Además, la cordobesa se diplomó en organización de eventos y relaciones públicas por lo que le gustaría seguir ligada al deporte por esa vía también, ya sea en un club u organizando eventos deportivos como los torneos de Haciendo Tenis.
Anécdota
Hace 6 años, la cordobesa Ornella Caron estaba volviendo en subte de uno de los torneos de Haciendo Tenis con Mariela García, amiga de la tenista que en ese momento estaba estudiando psicología y hacia entrevistas para la página BATennis. También se encontraba otra participante chilena, la cual durante el viaje le preguntó si era brasilera ya que le llamaba la atención el acento que tenía (solo era su tonada cordobesa). Más tarde, en el mismo transporte público, Mariela le ofreció a Ornella vivir con ella en Buenos Aires ya que le veía talento y creía que era una buena oportunidad para estar más cerca de los torneos y las competencias que se hacían en la capital del país. La cordobesa quedó impactada por la idea de Mariela y casi sin pensarlo aceptó la propuesta. Ella dice que fue amistad a primera vista por la conexión que tuvieron desde el primer instante y por no pelearse nunca en los 4 años de convivencia que tuvieron. Hasta el día de hoy son grandes amigas.
